En los últimos años, las series diarias han vivido un resurgir que las ha consolidado como un pilar fundamental en la televisión española. Desde la llegada de “Amar en tiempos revueltos”, que marcó un antes y un después en el formato, hasta éxitos más recientes como “El secreto de Puente Viejo” o “La Promesa”, estas producciones han encontrado su espacio en las parrillas de las principales cadenas. Sin embargo, el gran fenómeno actual es sin duda “Sueños de Libertad”, que no solo se ha convertido en la ficción más vista de la televisión, sino que también ha revolucionado el género con propuestas innovadoras.
Esta serie, creada por Beatriz Duque y Verónica Viñé, ha aportado una bocanada de aire fresco al formato diario gracias a su ambiciosa apuesta técnica y narrativa. Uno de sus principales atractivos es el cuidado en la producción, en la que destacan especialmente las secuencias rodadas en exteriores, un recurso que otorga veracidad y belleza visual a la historia.
Joan Noguera, director de la serie, explicó en una entrevista a BLUPER durante una visita al rodaje que desde el inicio del proyecto tenían claro que debía diferenciarse del resto de ficciones diarias. “Teníamos intención de dar un salto cualitativo, tanto en decorados como en exteriores. Nos parecía fundamental rodar más fuera del plató para que la serie ganase en realismo”, comentaba Noguera. Esta visión les llevó a aprovechar la belleza de Toledo, ciudad que acoge algunos de los principales escenarios naturales de la trama, especialmente la colonia, que se ha convertido en el epicentro visual y emocional de la historia.
El trabajo en exteriores no es el único sello distintivo de “Sueños de Libertad”. La serie cuenta con tres unidades de rodaje simultáneas, dos en plató y una dedicada exclusivamente a grabaciones en exteriores. Esta organización permite que la ficción se mantenga ágil y dinámica, evitando la repetición de espacios que a menudo limita la creatividad en las series diarias. Para Noguera, esta multiplicidad de escenarios es clave para la diversidad narrativa: “Los exteriores permiten enriquecer las tramas, ofrecer nuevas perspectivas y que los personajes se muevan en ambientes variados y vivos“.
El reparto, con Natalia Sánchez, Dani Tatay y Oriol Tarrasón a la cabeza, se enfrenta diariamente a un ritmo de trabajo intenso, propio de una serie en constante evolución. Y es que en “Sueños de Libertad” nada está completamente cerrado: los guiones se adaptan sobre la marcha a las necesidades de producción, a los cambios en el elenco o a las demandas del público. “Tenemos 25 actores en plantilla y, si alguno falta por cualquier motivo, hay que reestructurar las tramas. Esto hace que la historia esté siempre viva y que los guionistas tengan que ser muy flexibles“, confiesa el director.
La importancia del detalle es otra de las obsesiones del equipo. Noguera destaca que en los decorados interiores, como la casa de los De la Reina, se ha cuidado cada rincón para que las escenas fluyan de forma natural. “Es una casa real, con todas sus habitaciones conectadas. Los personajes pueden moverse de la galería al despacho o a la cocina sin que haya cortes o trampas técnicas. Eso da una autenticidad que el espectador percibe inmediatamente“, señala.
El sistema de producción es una maquinaria perfectamente engrasada. Para coordinar los tres equipos de rodaje y asegurar que los actores no se solapen en distintas escenas, el equipo liderado por Mario, el ayudante de dirección, elabora minuciosas planificaciones. “Es un trabajo muy exigente. Hay que cuadrar horarios, localizaciones, disponibilidad de actores… y todo ello respetando la continuidad narrativa y emocional“, explican.
Además, el guion juega un papel crucial en mantener la serie fresca y dinámica. Los escritores trabajan bajo la premisa de evitar la repetición y sorprender al espectador cada día. “Queremos que el público no se pierda ni un detalle, que sienta que si no ve un capítulo, se perderá algo importante“, explica Noguera. Esto también se refleja en el ritmo de las tramas, que avanzan rápidamente y sin concesiones.
La apuesta por la calidad se extiende a todos los departamentos: vestuario, fotografía, maquillaje y dirección artística trabajan de forma coordinada para mantener un estándar alto. La serie ha logrado así elevar el listón de lo que se espera de una ficción diaria, situándola en un nivel cercano al de producciones de prime time.
No es casualidad que Antena 3 haya confiado en “Sueños de Libertad” para suceder a “Amar es para siempre”, un reto que parecía complicado dado el arraigo de la anterior serie entre el público. Sin embargo, la jugada les ha salido bien: “Siempre superamos el millón de espectadores y eso en la televisión actual es un logro enorme“, admite el director, que también reconoce que el éxito ha superado sus expectativas iniciales.
El fenómeno de “Sueños de Libertad” demuestra que el formato diario no está reñido con la calidad. En un panorama en el que las plataformas de streaming apuestan por miniseries o producciones limitadas, esta ficción ha demostrado que la televisión en abierto todavía tiene mucho que ofrecer. “Aquí las series diarias sobreviven gracias a la audiencia. No hay un final cerrado: el público decide cuándo debe terminar“, apunta Noguera.
Para el equipo, el compromiso con la calidad no es negociable. Desde el inicio, el objetivo ha sido claro: ofrecer un producto que respete la inteligencia y la sensibilidad del espectador. “Luchamos cada día con ahínco y entusiasmo para sacar adelante este proyecto. Y creo que el esfuerzo se nota en cada capítulo“, concluye el director.
Con cada episodio, “Sueños de Libertad” no solo entretiene, sino que reafirma el potencial del serial diario en España, demostrando que con creatividad, esfuerzo y un equipo comprometido, se pueden contar historias emocionantes y de calidad día tras día.