Las tardes de La 1 han sido, durante las últimas semanas, un verdadero campo de pruebas para RTVE. La cadena pública ha intentado reflotar ‘La familia de la tele’, un programa que a pesar de los esfuerzos no ha logrado los resultados en audiencia que esperaba. Esta lucha por levantar el espacio no solo ha tenido consecuencias directas sobre el propio programa, sino que ha terminado afectando también a las dos ficciones más consolidadas dentro de esa franja horaria: ‘Valle salvaje’ y ‘La promesa’, ambas producidas por Bambú Producciones.

El principal problema ha sido la alteración constante de los horarios en los que se emiten estas dos series, lo que ha provocado confusión entre los espectadores y, como resultado, una caída en sus cifras de audiencia. Esta decisión estratégica, con el objetivo de potenciar el nuevo programa de entretenimiento, terminó por desestabilizar los pilares más fuertes de la franja vespertina.

Ramón Campos, productor ejecutivo y responsable de ambas ficciones, ha expresado su opinión sobre esta situación con total transparencia en declaraciones recogidas por BLUPER. Campos reconoce que él se dedica a producir las series, mientras que la programación es responsabilidad de la cadena. “Yo produzco y ellos programan, y así me ha ido bien en mi vida profesional. Si a mí me dejan producir mis series, yo no les puedo decir cómo programar”, comenta, dejando claro que prefiere mantener una línea de separación entre la creación artística y las decisiones de parrilla.

No obstante, Ramón no oculta que los cambios de horario han tenido un impacto negativo. “Si me voy a datos objetivos, sí es cierto que las series están sufriendo algo que pasa en todas las cadenas”, reconoce, apuntando a un problema que no es exclusivo de RTVE, sino común en la industria televisiva cuando una programación se mueve de forma errática.

El productor explica con detalle que estos movimientos han sido consecuencia directa de la introducción de ‘La familia de la tele’. “Cuando llega un programa nuevo, una apuesta tan fuerte como la que estaba haciendo TVE con ‘La familia de la tele’, ha habido movimiento de duración y de horario. Hemos cambiado de horario cuatro o cinco veces”, revela Campos, dejando en evidencia la falta de estabilidad en la programación de las tardes.

Este incesante cambio en la franja horaria es más que un simple inconveniente técnico. Para Campos, tiene un efecto directo en el comportamiento de la audiencia. “Las series diarias tienen que acostumbrar al público a una hora y una cadena. Cuando esa costumbre se la rompes al espectador, éste puede acabar yéndose a RTVE Play”, advierte, aludiendo a la migración que puede sufrir la audiencia hacia plataformas digitales ante la confusión generada por los constantes cambios.

A pesar de las dificultades, Ramón Campos asegura que ha mantenido diálogo con la dirección de RTVE para analizar la situación y encontrar soluciones. Según él, se ha llegado a la conclusión de que el horario más favorable para obtener una buena cuota de pantalla y un promedio estable de espectadores es el de las cinco de la tarde, o incluso un poco antes. “A medida que nos acercamos más adelante, la serie va a peor por la competencia”, explica, subrayando que la competencia televisiva aumenta conforme avanza la tarde y que por eso es mejor fijar la emisión en una franja donde pueda brillar sin tanta competencia directa.

Aunque la situación ha sido frustrante para Campos, quien admite que “duele a nivel personal ver que un producto está funcionando bien y que la cadena lo maneja para intentar competir”, también muestra comprensión hacia la lógica que ha seguido RTVE. “RTVE ha hecho lo que tenía que hacer. Una vez haces esa apuesta, tienes que intentar manejarla de la mejor forma posible para intentar salvarla”, reconoce el productor, demostrando que entiende la presión que tiene la cadena pública para equilibrar su oferta y cuidar sus productos.

Además, Campos admite que desde la perspectiva de RTVE, las series de Bambú Producciones son solo una pieza dentro de un engranaje mucho más grande. “Si te pones en su lugar, acabas entendiendo que nosotros somos una pieza en ese organigrama”, reflexiona, reconociendo que las decisiones de parrilla responden a intereses y prioridades que van más allá del éxito individual de una serie o programa.

A pesar de todo este escenario complejo, el futuro de las series no está en riesgo. De hecho, Ramón Campos confirma que ambas ficciones cuentan con planes de renovación. En concreto, ‘Valle salvaje’ continuará con al menos 180 capítulos más, mientras que ‘La promesa’ seguirá adelante con nuevas temporadas. Esto refleja la confianza que la cadena y la productora mantienen en la calidad y el potencial de estas historias.

Además, Ramón subraya que el impacto de las series no se limita solo a la televisión en abierto. Ambas tienen un fuerte seguimiento en la plataforma digital de RTVE, lo que les otorga una segunda vida y amplía su alcance más allá del horario de emisión tradicional. A esto se suma la buena recepción en mercados internacionales, especialmente en América Latina, donde ‘La promesa’ ha llegado a posicionarse entre las series más vistas en plataformas de streaming, alcanzando incluso la séptima posición en el ranking global de HBO.

Este dato confirma que, aunque las cifras de audiencia en la televisión lineal hayan sufrido altibajos, las ficciones de Bambú Producciones tienen una gran fuerza y aceptación entre el público, tanto a nivel nacional como internacional.

En definitiva, el diagnóstico que hace Ramón Campos es claro: las series funcionan y tienen un gran potencial, pero necesitan estabilidad para mantener y crecer su audiencia. El constante vaivén en los horarios y cambios en la programación afectan negativamente la fidelidad del público, que prefiere encontrar una rutina fija para seguir sus ficciones favoritas.

Campos lo expresa con la serenidad de quien conoce bien las reglas del juego televisivo, pero también con la firmeza de quien defiende su trabajo y el valor de sus producciones frente a decisiones que pueden poner en riesgo su éxito.

Así, las tardes de La 1 siguen siendo un terreno de batalla donde RTVE trata de equilibrar nuevas apuestas y mantener a sus programas más consolidados, pero está claro que, para que las series como ‘Valle salvaje’ y ‘La promesa’ sigan triunfando, se requiere de una estrategia que garantice la estabilidad en la emisión y permita que el público las siga con confianza y sin interrupciones.