Los próximos episodios de La Promesa se presentan cargados de tensión, giros inesperados y decisiones que cambiarán para siempre el destino de varios personajes. El capítulo 668, previsto para el miércoles 3 de septiembre, será clave: Lorenzo, cada vez más ambicioso y calculador, pondrá sobre la mesa una condición insólita y cruel. Exigirá casarse con Ángela a cambio de devolverle la libertad, un chantaje que deja en shock a Leocadia y que amenaza con desatar una tormenta de consecuencias irreparables.

Desde el primer momento, Leocadia se muestra incrédula. No da crédito a la propuesta del capitán, que más que un ofrecimiento es una amenaza disfrazada de acuerdo. Ella insiste en que acepte el dinero que ya le había ofrecido como compensación, esperando así poner fin al asunto. Pero Lorenzo no se deja persuadir: su único objetivo es quedarse con Ángela, aunque para ello deba utilizar el sufrimiento de madre e hija como moneda de cambio. Su plan va más allá de un simple matrimonio; lo que pretende es herir profundamente a Leocadia y, de paso, a Curro, quien se ha convertido en el mayor apoyo de la joven.

Consciente de que no puede perder tiempo, Leocadia busca alternativas. Cuando se da cuenta de que Lorenzo rechaza el dinero y no cederá fácilmente, recurre a Petra para que se encargue de ir en busca de ayuda. La situación requiere actuar con astucia y rapidez, pues la vida y la libertad de Ángela están en juego.

Mientras tanto, Martina y Jacobo trazan su propio plan. Deciden acudir al encuentro del varón de Valladares, convencidos de que, si Catalina no asiste, tal vez logren captar la atención y buena disposición del noble. Sin embargo, la jugada no sale como esperaban. Aunque logran reunirse con él, su intento por convencerlo para que dialogue con el resto de la nobleza fracasa. El varón no solo se muestra intransigente, sino que además deja claro su desprecio hacia Catalina, la hija de Alonso, lo que genera un nuevo conflicto.

A su regreso al palacio, las tensiones aumentan. El marqués se entera de lo sucedido y Catalina escucha de primera mano los insultos que el varón lanzó contra ella. El dolor y la humillación calan hondo en la joven, alimentando un resentimiento que podría transformarse en un motor de decisiones futuras.

En paralelo, la trama se abre hacia otros frentes emocionales. Toño, animado por Manuel y con el apoyo discreto de Jana, da un paso firme hacia la reconciliación con Simona. A diferencia de otras veces, esta vez sus intenciones parecen sinceras y se percibe un aire de esperanza en esa relación que tanto ha sufrido por malentendidos y distancias.

Por otro lado, Vera vive con el corazón encogido. El temor a las represalias de su padre la persigue constantemente, sobre todo si Federico la llegase a traicionar. Aun así, Federico, demostrando que sus sentimientos son genuinos, se arriesga a visitarla. La tensión se concentra en la reacción de López, quien duda de si permitir ese encuentro o si interponerse para evitar consecuencias mayores.

El conflicto central, sin embargo, sigue girando en torno a Ángela. Cristóbal, cada vez más presionado, se enfrenta a Curro por haber desobedecido órdenes y abandonar el palacio en su desesperada búsqueda de la joven. El enfrentamiento deja claro que la situación está al límite, pero lo inesperado sucede: gracias a la intervención de Petra y Pía, Curro logra imponerse y toma el mando de la búsqueda. Su amor por Ángela y la desesperación por salvarla le dan fuerzas para asumir un liderazgo que hasta ahora le había sido negado.

Cristóbal, al verse desplazado, experimenta un profundo malestar. No solo siente que pierde autoridad, sino que también carga con un secreto que lo atormenta: la sospecha de que podría ser el padre de Ángela. Esa revelación potencial no solo cambiaría su relación con ella, sino que también sacudiría los cimientos de la familia y el equilibrio de poder en el palacio.

Así, el capítulo 668 se perfila como uno de los más densos y emocionantes de la serie. Lorenzo, con su propuesta de matrimonio forzado, se posiciona como el gran antagonista, dispuesto a todo por imponer su voluntad. Leocadia, aunque desesperada, no está dispuesta a entregar a su hija sin luchar y buscará alternativas para protegerla. Catalina, herida en su orgullo, comienza a vivir su propio despertar frente a las humillaciones que recibe. Y Curro, apoyado por sus aliados, se convierte en la esperanza de que Ángela pueda ser encontrada antes de que Lorenzo cumpla con su amenaza.

Lo que queda claro es que en La Promesa nada volverá a ser igual tras este episodio. Los lazos familiares, las alianzas y los secretos ocultos están a punto de salir a la luz. Y, como suele ocurrir en esta historia, cada decisión traerá consigo un precio que alguien deberá pagar.