Leocadia lanza una amenaza directa a Curro: si se atreve a ayudar a Ángela, no dudará en despedirlo. La joven, a pesar de su delicado estado de salud, se mantiene firme y resiste bajo la intemperie, decidida a hacer visible su rebeldía. Martina, desafiando las órdenes explícitas, visita en secreto a Ángela y confirma el grave deterioro físico que está sufriendo por esta obstinación. Por otro lado, Leocadia exige a Samuel que permanezca en La Promesa y, además, que oculte su reciente excomunión al duque, intentando controlar cualquier posible filtración que pueda afectar la imagen familiar.
Mientras tanto, en el hangar, Manuel y Toño vuelven a notar que alguien ha estado revolviendo sus cosas. La pregunta que ambos se hacen es quién puede estar detrás de estos movimientos y qué motivos tiene para husmear en ese lugar. Ante esta inquietante situación, Curro se ofrece para vigilar y proteger, aunque en realidad su verdadera intención es poder reunirse con Esmeralda, la dependienta de la Joyería Llop, en busca de información crucial.
Por otra parte, Rómulo, decidido a abandonar La Promesa, busca la ayuda de Catalina para comunicarle a Alonso su decisión de marcharse. La tensión crece con cada paso que da hacia su salida definitiva, haciendo que el ambiente en la casa se vuelva cada vez más tenso.
En el hangar, Curro consigue acorralar a Esmeralda, decidido a extraerle toda la información posible acerca del veneno que está en el centro de los misterios que rodean la joyería y el asesinato que todos intentan esclarecer.
En el avance del capítulo que se emitirá el jueves 19 de junio, se revela que Curro comienza a sospechar que revelar su identidad a Esmeralda pudo haber sido un error grave, tal vez incluso mortal. Aun así, consciente de que ya no hay vuelta atrás, decide seguir adelante, enfrentando las consecuencias.
La situación de Ángela empeora considerablemente debido a su persistencia en permanecer acampada en los jardines. Su catarro comienza a complicarse, haciendo que su salud peligre realmente. Esto genera dudas sobre si Leocadia finalmente accederá a ceder ante la resistencia de su hija o si continuará firme en su postura implacable.
Por otro lado, la inminente marcha de Rómulo comienza a notarse en el servicio, provocando susurros y especulaciones entre los criados. Sin embargo, una figura relevante dentro de la nobleza parece intuir las verdaderas intenciones del mayordomo antes que nadie, lo que añade un nuevo elemento de intriga a la trama.
Lorenzo, normalmente distante, intenta actuar como mediador entre Ángela y Leocadia. Reconoce y elogia la fuerza y determinación de la joven frente a la autoridad de su madre, buscando apaciguar las tensiones familiares.
Por último, Martina no consigue encontrar un terreno común con Jacobo en relación al conflicto del título nobiliario. Su prometido parece cada vez más frustrado y desesperado por la situación, lo que augura nuevos enfrentamientos y complicaciones en los próximos episodios.